Bienaventuranzas del “voluntario” y “cuidador” (Julián del Olmo, sacerdote y periodista)

1. Bienaventurados los que saben y asumen que todos somos vulnerables (corporal, mental,                   emocional, relacional y espiritualmente) y por tanto necesitados de comprensión y ayuda.

 

2. Bienaventurados los que ayudan, cuidan y respe- tan a las personas como quisieran que hicieran con ellos si estuvieran en su situación.

 

3. Bienaventurados los que “escuchan” a las personas para conocer sus necesidades reales y           responder adecuadamente a ellas y no a otras supuestas o inventadas.

 

4. Bienaventurados los que “acompañan” en la Vida y en la Muerte a los más necesitados y                    vulnerables.

 

5. Bienaventurados los “invisibles” que “visibilizan” a las personas más vulnerables porque la       sociedad las quiere ocultar y “ojos que no ven, corazón que no siente”.

 

6. Bienaventurados los que “dignifican” a las personas más vulnerables y no ven sólo su “fragilidad” y sus “carencias”, sino también sus capacidades y potencialidades y ayudan a desarrollarlas por mínimas que sean.

 

7. Bienaventurados los que además de “compadecerse” de las personas más vulnerables las ven como sujetos de derechos que deben defender y respetar y si llega el caso denunciar.

 

8. Bienaventurados los que saben que no solo hay que “cuidar” a otros, sino también “cuidarse” uno mismo porque todos somos frágiles y vulnerables.

9. Bienaventurados los voluntarios y cuidadores que encuentran “acogida, apoyo y formación” en sus instituciones, organizaciones, parroquias y comunidades porque el servicio quema mucho a la persona y “el espíritu está pronto pero la carne es débil”.

 

10 Bienaventurados los voluntarios y cuidadores que han interiorizado que la relación de ayuda es un trueque entre dar y recibir, sabiendo que se recibe mucho más de lo que se da.

 

11. Bienaventurados los que ven en los más necesitados y vulnerables a Jesucristo:

“Tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber, estaba solo y me visitaste, estaba triste y me consolaste, estaba enfermo y me cuidaste... ”

 

12. Bienaventurados los voluntarios y cuidadores (con carné o anónimos) que dan gratis lo que gratis han recibido. Ellos dignifican a la sociedad en la que todo se compra y se vende.

 

13. Bienaventurados los que tratan a las personas con “amor” conscientes de que el amor de Dios nos precede y nos excede.

 

14. Bienaventurados los creen que un “gesto” vale más que mil palabras y lo tienen en cuenta en sus actuaciones.

 

15. Bienaventurados los que han descubierto el valor “humano y divino" de la vulnerabilidad y la convierten en fuente de Vida para ellos y para los demás.

 

16. Bienaventurados los que creen que el “silencio” y la “oración” son dos factores fundamentales en la relación de ayuda.

 

17. Bienaventurados los que pasan por la vida haciendo “felices” a los demás porque ellos encontrarán la felicidad.