El
pasado jueves, 7 de febrero, tuvo lugar en el Seminario Diocesano de Logroño
(La Rioja) un encuentro entre nuestro obispo D. Carlos Escribano y una
treintena de agentes sanitarios cristianos (médicos, a.t.s., auxiliares de
enfermería, celadores, psicólogos, capellanes e investigadores).
Dicha reunión se enmarca dentro de una
serie de “cafés-misión” que la “Delegación para la Iglesia en salida” ha
organizado este curso con cristianos laicos que trabajan en los distintos “escenarios”
que el Papa Francisco, en “Evangelii Gaudium”, nos indica como prioritarios (y
que, ¡cómo no!, serán relevantes en la próxima Misión Diocesana que
realizaremos en La Rioja): El campo de los medios de comunicación social; de la
universidad; de la investigación científica; de las periferias sociales y
existenciales –entre las que se encuentra la enfermedad y el dolor-.
Después de recibir el saludo de nuestro
obispo, se entabló un fluido diálogo durante más de hora y media en torno al
siguiente guión: 1) ¿Qué opinión se tiene de la Iglesia en el mundo de la salud?;
2) El Papa Francisco nos invita a ser una “Iglesia en salida”, ¿cómo podríamos
hacer, si crees que es posible, esta tarea en tu escenario?; 3) Vosotros sois
“cristianos laicos, Iglesia en el mundo de la enfermedad, en la periferia del
dolor”, ¿os sentís enviados por la Iglesia en vuestra tarea? ¿qué pedís a la
Diócesis, al Secretariado de Pastoral de la Salud, para que os ayude a
realizarla?
Entre las muchas e importantes aportaciones,
podemos destacar las siguientes: El deseo unánime de que se sigan realizando
estos encuentros como medio para poder conocerse y ayudarse mutuamente; la
necesidad de que la Diócesis ofrezca una formación específica para que los agentes
sanitarios cristianos puedan ser mejores discípulos misioneros en el campo de
la salud; y la petición de que se cree una plataforma diocesana a la que ellos puedan
acudir para recibir un poco de luz a la hora de afrontar las mil y una
situaciones variopintas y urgentes que surgen en cada jornada de trabajo.
Nuestro obispo D. Carlos escuchó con
atención, tomó nota y ya está dando los pasos para responder a estas demandas
con el fin de que la próxima Misión Diocesana se haga presente de manera lo más
eficaz posible en este mundo de la salud y de la enfermedad.
Javier Martín Martija
Delegado de Iglesia en salida
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