Tema 6. Ser voluntario en la comunidad cristiana
La comunidad cristiana es
una comunidad de servidores a ejemplo de Cristo que vino no para ser servido
sino para servir (Mt. 20,28). Somos comunidad de servidores: amando al prójimo,
sirviendo a los demás, defendiendo sus derechos, especialmente de los más
pobres y necesitados, siendo solidarios con todos los pueblos, con todas las
personas.
En la comunidad cristiana
todos sus componentes deben ser, pues, servidores, todos deben ser voluntarios.
Como dice D. Ramón Echarren, Obispo de Canarias, “todo cristiano, por el hecho de ser discípulo de Jesús”, ha de ser un
voluntario en el campo de lo social”.
Este voluntariado, exigencia
de nuestra condición de creyentes en Jesús, lo podemos vivir dentro de la
comunidad cristiana, en tareas sociales desarrolladas en la propia comunidad,
pero no sólo en servicio de los miembros de la comunidad, sino de todo
necesitado, o en cualquier ámbito de la sociedad desde la propia Iglesia como
comunidad de referencia.
EL
SERVICIO A LA SALUD ,
UN MINISTERIO ECLESIAL
Junto con el mandato de
anunciar el Reino Cristo encomendó a su Iglesia el servicio a la salud y a los
enfermos (Lc 10,9). Es, pues, un ministerio confiado a toda la comunidad, en el
que cada bautizado participa según el don recibido y de acuerdo con su
capacidad de respuesta a las exigencias de su bautismo.
Muchos voluntarios
cristianos se sienten llamados y motivados para participar en ese ministerio.
Unos realizan una labor de carácter social; otros, más marcadamente pastoral.
Habitualmente pertenecen a grupos constituidos, están insertos en la comunidad
cristiana o en los equipos de pastoral de la salud.
En todo caso, el voluntario
que, en virtud de su fe, trabaja en el mundo de la salud y de la enfermedad es
también un enviado. Actúa en nombre
de la comunidad cristiana, hace suya su misión, y, por tanto, ha de poseer un
sincero espíritu eclesial.
“La
eclesialidad debe conjugar la pluralidad de las acciones caritativas-sociales
con la comunión de todos los sujetos, individuales y colectivos, que las
realizan. La dimensión evangelizadora de la Pastoral de la Caridad ha de tener necesariamente una referencia
a la Iglesia ,
ya que es ella el sujeto al que el Señor confió la misión de evangelizar. No
basta con afirmar que es la
Iglesia donde se realiza. Hay que descubrir que es la misma
Iglesia la que la realiza, en la pluralidad de sus sujetos individuales,
colectivos e institucionales”.(La
caridad en la vida de la
Iglesia , CEE).
CAUCES
PARA LA COMUNIÓN
El sentido eclesial del
voluntariado cristiano y la condición misma de la Iglesia (que es siempre
comunión) se expresan en variadas formas cuyo denominador común es siempre la
referencia a una comunidad.
De ahí que el voluntariado
cristiano que actúa en el mundo de la salud y de la enfermedad tenga también
sus cauces comunitarios. Señalamos algunos:
·
En primer lugar, la parroquia, como medio habitual en el que se vive, se celebra y se
traduce en testimonio la fe de los creyentes. El voluntario se inserta dentro
de ella, dentro del equipo de pastoral de la salud, o bien dentro del equipo de
visitadores o de asociaciones/movimientos vinculados a ella.
·
Las instituciones sanitarias, sociosanitarias y
geriátricas, en las que actúan enviados por sus comunidades, o bien desde la comunidad
de la institución (capellanía, comunidad religiosa).
·
Asociaciones, grupos de voluntariado cristiano.
Para favorecer la comunión
eclesial y, al mismo tiempo, para evitar la pérdida de eficacia caritativa y
apostólica, es preciso que el voluntariado cristiano que actúa en el mundo de
la salud y de la enfermedad posea una adecuada coordinación y un claro sentido
de colaboración. Esto no es posible si no existe una conveniente jerarquización
de referencias. El cristiano no debe actuar por libre.
ESPACIOS
PARA EL SERVICIO
Tanto el voluntariado
“social” como el “pastoral” dentro del mundo de la salud y de la enfermedad
tiene amplios espacios de servicio dentro de la comunidad. Indicamos algunos de
los ministerios y ámbitos en los que puede colaborar:
*
Catequesis de los sanos (niños, jóvenes y adultos).
*
Atención (asistencial, pastoral) a los enfermos de
la comunidad.
*
Campañas de promoción de la salud, de educación
sanitaria, de donación de órganos etc.
*
Instituciones o iniciativas comunitarias de atención
a sectores marginados.
*
Instituciones sanitarias, sociosanitarias y geriátricas
dentro del territorio de la parroquia.
*
Equipos de pastoral de la salud (cape-llanías) de
las instituciones.
TEXTO
BÍBLICO
Hechos 2, 42-47.
CUESTIONARIO
¿Qué es la Iglesia ? ¿Por qué la
comunión es una de las dimensiones de la Iglesia ? ¿Por qué el servicio a la salud y a los
enfermos es siempre eclesial? ¿Como voluntario/a has encontrado cauces
adecuados de comunión eclesial? ¿El voluntariado cristiano tiene suficientes espacios
de actuación dentro del mundo de la salud y de la enfermedad? ¿Crees que el
voluntariado cristiano está suficiente insertado dentro de la comunidad
cristiana y adecuadamente coordinado? ¿Qué te sugiere el texto bíblico?
COMPROMISO
ORACIÓN
COMUNITARIA
Perdona,
Señor, a tu Iglesia, a cada uno de nosotros:
por
nuestra soberbia e incomprensión con los pobres;
por
nuestros pecados personales y colectivos contra la caridad;
por
nuestros pecados de acción y omisión contra la justicia;
por
nuestra falta de esfuerzo para atacar las raíces de la injusticia;
por
buscar casi siempre nuestro interés personal y de grupo;
por
ser incoherentes con nuestra fe.
Perdónanos,
Señor, porque no somos testigos de tu Amor
y
porque no manifestamos claramente que es la Iglesia
quien
realiza la Caridad
por nuestro medio”.
BIBLIOGRAFÍA
La
pastoral de la salud en la parroquia, Depto. de PS de la CEE.
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